Cómo hacer que tu mascota y tus niños se lleven bien
La llegada de una mascota a la casa es súper beneficiosa para la educación de los más pequeños. Sin embargo, cuando recibimos a un nuevo amigo tenemos que fomentarles el respeto y el buen cuidado
Parece obvio, pero no todos los niños están preparados.
Uno de los principales aspectos que debemos trabajar con los más chicos es que la mascota será a partir de ahora un miembro más de la familia. Como tal debemos abrirnos a quererlo y respetarlo como lo hacemos con todos los demás.
En esta nota dejamos un listado de tips y consejos que podemos tener en cuenta para que los niños y niñas vivan la experiencia de la mejor manera.
Ser ejemplares, involucrarlos en la llegada de la mascota y darles tareas específicas para que ellos hagan con el animal, son algunas de las cuestiones básicas que nos van a ayudar.
Toda la familia debe estar de acuerdo con la llegada de tu mascota
Cuando llega una mascota a la casa toda la familia tiene que estar de acuerdo con la decisión. Si nosotros estamos felices, iniciaremos la relación con el animal de la mejor manera y los niños podrán vernos como accionamos con él, desde la alegría, el amor y el cuidado.
Ese ejemplo inicial será fundamental mantenerlo a diario el resto de la convivencia con el animal. Es justo aquí donde debemos mostrarles que hay que respetarlo y darle siempre su espacio.
Si la llegada de la mascota se da en fin de semana o en vacaciones, nos encontrará a todos más relajados para empezar la relación con el nuevo integrante.
Está comprobado que la llegada de una mascota al hogar tiene un montón de beneficios para los más pequeños:
- Les reduce el estrés.
- Se sienten acompañados.
- Les mejora la autoestima.
- Les aportan felicidad.
Desde el primer día debe ser un espacio agradable para tu mascota
Ese primer día es clave, tanto para enseñarles el amor hacia el nuevo amigo, así como también, para transmitirles otros valores importantes, que luego les servirán para la vida:
- A adquirir responsabilidad.
- A aprender valores.
- A brindar seguridad.
- A no ser agresivos.
- A hacer cosas aunque a veces no tengamos tantas ganas.
Es muy importante involucrarlos en esta llegada, contarles cómo serán las reglas, dejarles en claro qué nos aportará a nosotros el animal y qué le daremos nosotros a él.
Que nos vean tratarlo bien, ayudarlo, generarle su espacio, los guiará a ellos para actuar.
Qué podemos hacer ese primer día:
- Contarles que es un miembro más de la familia.
- Elegir un nombre entre todos y de manera democrática.
- Poner las reglas esenciales de cuidado.
- Repartir tareas.
- Generar el espacio adecuado al animal.
- Mostrarles cómo se lo agarra, qué no le gusta al animal, etc.
Asignar tareas específicas a los niños para realizar con tu mascota
Nuestros niños deben tener en claro que el animal que ha llegado a la casa estará para siempre y es responsabilidad de toda la familia.
Debemos ser insistentes desde el primer momento en que una mascota nos trae alegría y diversión, pero también conlleva responsabilidad ya que depende absolutamente de nosotros.
Hay muchas actividades en las que los niños pueden colaborar desde el cuidado, según la edad:
- Llenar los cacharros de agua y comida.
- Completar en un lugar visible el calendario de vacunas.
- Llevarlos a pasear al menos una de las veces que va en el día.
- Ayudar a juntar la caca en las salidas o en el patio.
- Colaborar con el aseo (si hay varios niños en la casa se pueden turnar).
- Ser parte de la rutina de juegos de la mascota.
El rol de los adultos en la relación niño/mascota
Los adultos tendremos un rol muy importante en la relación que se dé entre el niño y la mascota.
Es que así como le mostramos límites a los niños, también debemos mostrárselos al animal. Tendremos que retarlo si algo que hace no está bien y marcar hasta dónde llega su espacio.
Para los niños será importante saber que la mascota tampoco invadirá sus lugares. Cada quien tiene sus cosas y habrá que respetarlas.
En nuestro lugar de adultos también nos toca ser responsables de la seguridad del animal, sus cuidados y su protección. Serán funciones nuestras:
- Llevarlo al veterinario para sus controles periódicos.
- Identificarlo para que no se pierda.
- Proveer alimento, guardería, vacunas. (En Life Seguros, el seguro Mi Mascota cubre varias de esas instancias).
- Hacerlos viajar seguros en el auto.
- Estar atentos a su estado de ánimo.
- Ponerles límites cuando sea necesario.
Si nuestra mascota se enferma, se pierde o tiene un accidente debemos brindarle amor y atención, al mismo tiempo que contener a nuestros niños. Podemos hacerlos partícipes del momento y de acuerdo a la edad, incluso, se les puede pedir ayuda en los cuidados.
La muerte de una mascota es también un punto que no podemos dejar pasar. Si eso sucede, sin duda será una enseñanza.Como adultos debemos acompañar a los más chicos y nunca mentirles sobre el proceso.
Será bueno compartir su dolor, poner fotos, hablar de la mascota cuando los días hayan pasado y tratar de aprender entre todos a recordar a la mascota con alegría.
Los peques siempre aprenden rápido. Si los educamos para criar una mascota desde el respeto y el amor, serán más empáticos, sociales y responsables.