Alquilar tu propiedad: Guía completa para propietarios
Las nuevas reglas del sector inmobiliario están abriendo el juego para que muchos propietarios se animen otra vez a poner en alquiler sus propiedades.
En la ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, ya se ven muchos más carteles de alquiler que a finales del año pasado.
Si estás por dar ese paso, en esta nota de Life te ofrecemos algunas ideas y herramientas que van a ayudarte a tomar la decisión.
Nuevo escenario inmobiliario: Pasos y consejos para poner en alquiler tu propiedad
Es importante firmar un acuerdo con el arrendatario, así como también fijar un precio justo. Obtener un seguro de caución confiable es otro aspecto a considerar. Si no podés manejar el alquiler por tu cuenta, es recomendable encontrar una agencia inmobiliaria.
Pero además hay otras variables que podés acordar con tu inquilino, para que el tiempo de duración del contrato, sea de conveniencia para ambos.
Acercate a más tips aquí.
Pasos fundamentales para alquilar tu inmueble con éxito
Para alquilar tu inmueble, debes considerar tres aspectos fundamentales. Estos son: las condiciones de la propiedad, el precio que establecerás y si lo harás por tu cuenta o con la ayuda de una inmobiliaria.
Condiciones de la propiedad: El punto de partida para el alquiler
Las condiciones en las que se encuentra tu propiedad son la primera entrada para el posible inquilino. Si el inmueble tiene problemas estructurales es muy recomendable que las soluciones antes de alquilar. No sólo mejorarán el precio, sino que además evitarás problemas más graves que puedan darse por el uso.
Un departamento o una casa bien pintados, con todos los artefactos en funcionamiento, será mucho más fácil de alquilar.
Asegurate de tomar buenas fotos y hacerlas a la luz del día. Si lo vas a alquilar con muebles u otros elementos es muy recomendable que hagas un buen inventario, que por supuesto, luego, pondrás en el contrato.
Precio del alquiler: Cómo establecerlo de manera justa y competitiva
La segunda variable que vas a tener que estudiar es el precio de la propiedad. Lo más recomendable es analizar el precio de propiedades similares en el mercado.
Será fundamental tener en cuenta las distintas variables de la propiedad: metros cuadrados, ciudad, barrio o calle en la que se encuentra, tipo de edificio en el caso de que sea un departamento, antigüedad, etc.
Una buena forma de establecer un precio adecuado es contratando a un tasador o asesorarte, por ejemplo, por alguna institución como el colegio de martilleros. También, en la actualidad, existen algunas páginas que permiten hacer simulaciones de precios.
Contratar o no una inmobiliaria es una gran decisión.
Esto dependerá mucho de los tiempos, de las ganas o de lo preparado que estés vos para asumir las cuestiones relacionadas con un alquiler.
La inmobiliaria, por supuesto, se va a llevar una comisión del valor final del precio de la propiedad, pero puede ser muy útil a la hora de resolver cuestiones como: redacción del contrato, tasación, ayuda en el análisis de los alcances de la ley de alquileres, los arreglos que haya que hacer en el departamento y corresponden al propietario, los intercambios con el inquilino, etc.
Elegir al inquilino ideal: Seguridad y tranquilidad para tu inversión
Después de determinar el valor de la propiedad y decidir si usar una inmobiliaria, asegúrate de que el inmueble esté listo para alquilar. Luego, elige el inquilino y establece las condiciones del alquiler.
Requisitos para seleccionar al inquilino indicado
Para atraer a un potencial inquilino, lo mejor es ser bien preciso en el aviso sobre las condiciones del alquiler. Con los requisitos de ingreso claros de antemano será más fácil que se contacten sólo los que cumplan aquellas condiciones.
Después de seleccionar a los mejores candidatos, es importante realizar un análisis de su solvencia, solicitar la documentación necesaria y, si es posible, obtener referencias anteriores. Esto te servirá para estar seguro que podrá afrontar el pago del alquiler.
Contrato de alquiler y seguro de caución: Aspectos legales imprescindibles
Cuando creas que hay un candidato indicado, el próximo paso será pedir una seña para sellar la palabra entre ambos, hasta la firma del contrato de arrendamiento.
Cláusulas esenciales en un contrato de alquiler
La firma de un contrato, por medio de un escribano, es un paso que sin duda no podés dejar de hacer. Incluso si el inquilino es alguien recomendado o de suma confianza, el contrato los ayudará a ambos a la hora de establecer acuerdos.
Beneficios de contar con un seguro de caución
Una herramienta que es de suma importancia a la hora de cerrar el trato con el inquilino es la contratación de un seguro de caución. Puede ser un gran complemento del contrato y te va a brindar aún más tranquilidad durante el tiempo que dure el alquiler.
Life Seguros ofrece un seguro de caución que cubre el alquiler en caso de que el inquilino no pague en tiempo y forma, ya sea porque perdió capacidad de pago o por cualquier otra cuestión de emergencia.
En caso de incumplimiento, el seguro cubre hasta el 50% de las expensas ordinarias y hasta el 20% de la suma asegurada del alquiler para servicios.
También cubre la ocupación indebida hasta la restitución del inmueble o hasta agotar la suma asegurada, lo que ocurra primero.
Contar con un buen seguro de caución se está volviendo un ítem que cada vez más usado a la hora de alquilar una vivienda.
Tips adicionales para un alquiler exitoso y sin inconvenientes:
En el contrato de alquiler se detallan los puntos importantes del acuerdo. Además de los modelos tradicionales, hay otros consejos que los propietarios suelen seguir para mejorar la relación con el inquilino.
- Sumar el valor de las expensas (cuando la propiedad es un departamento) y del ABL al precio del alquiler. Así el inquilino no tendrá la presión de pagarlo mes a mes y el propietario no se preocupará por la falta de pago.
- Cambiar los servicios a nombre del inquilino mientras alquila la propiedad, para que pueda resolver cualquier deuda o corte de servicio por falta de pago.
- Sacar un seguro clásico de vivienda con tu compañía de seguro y en caso de que haya un siniestro, las dos partes salgan beneficiadas, ya sea por daños estructurales de la propiedad o daños de los muebles y artefactos que hay dentro de esta. Quedarán resguardados propietarios e inquilinos.
